Todos los entretelones de lo que es noticia en Mar del Plata.
“No quisiera estar en tu lugar. La vas a tener jodidísima porque en algún momento vas a tener que optar por Horacio (por Rodríguez Larreta) o por Patricia (por Bullrich). Y eso va a tener un costo altísimo. Que te sea leve”. En el hall del aeropuerto metropolitano, el ministro del gobierno nacional se cruzó hace dos meses con el intendente Guillermo Montenegro, con quien tiene buena relación, y lo chicaneó en relación a la feroz interna del PRO entre los “halcones” y “palomas”. Durante estas últimas semanas, si hubo alguien que bregó por la unidad de esa fuerza, al menos para presentar candidatura única en la elección para gobernador por la alianza opositora, ese fue el jefe comunal local. El fracaso en tal sentido lo llevó a pensar seriamente en terminar su mandato el 10 de diciembre y directamente abandonar la política. Incluso, se lo confesó a sus más estrechos colaboradores, quienes no le creyeron.
Y con el correr de los días, comenzaron a llegar los ofrecimientos. Montenegro es uno de los intendentes que mejor mide en la provincia, y si hay algo que obsesiona a los líderes del PRO son las encuestas. Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich en primer lugar -ambos vinieron a Mar del Plata y se mostraron con el intendente en diferentes actividades- y luego sus respectivos precandidatos a gobernador, Diego Santilli y Néstor Grindetti, lanzaron ofertas para todos los gustos. Hubo promesas de ministerios en caso de triunfos y otros cargos (el diputado Hernán Lombardi en persona llegó a la ciudad en “misión oficial”) y finalmente, Santilli, hasta promediar la semana anterior, siguió insistiendo con ofrecerle la candidatura a vicegobernador. En la tierra de los campeones de surf, en menos de cuatro años, Montenegro se convirtió en un émulo de “Lele” Usuna. Supo y logró surfear las olas de ofertas y presiones y llegó sano y salvo a la orilla. El viernes, tras anunciar a través de un video que irá por la reelección como intendente, sonrió y respiró aliviado al ver los posteos en redes sociales. En una interna en llamas, Rodríguez Larreta, Bullrich, Santilli y Grindetti (más allá de la amabilidad y la “buena onda”, a decir verdad necesitan los votos en la segunda ciudad más importante de la provincia electoralmente hablando) coincidían en reivindicar la candidatura de Montenegro, quien jugará con las dos boletas tanto en Provincia como Nación. Surfeó sobre tiburones hambrientos y zafó.
En la tarde del jueves, Montenegro se reunió en su despacho con dos de sus colaboradores más cercanos. La noche anterior ya había comunicado su decisión a su esposa, Eugenia Pruzzo, a sus hijos y a un par de familiares más. “Salimos a la cancha. Vos vas a ser el jefe de campaña”, le dijo ese jueves a la noche al senador provincial Alejandro Rabinovich (en 2019 tuvo ese rol aunque desde atrás del escritorio, en el 2021 fue candidato y elegido senador provincial y ahora se dispone a desarrollar un rol más activo desde la comunicación, se supo con el correr de los días). El viernes reunió en su despacho a sus colaboradores y al equipo de prensa y comunicación. “Armemos un mensaje para un video”, dijo, y cuando le preguntaron cuál era la idea a transmitir fue categórico: “quiero explicar que no le saco el culo a la jeringa”. “No podemos decir eso”, respondió sonriente quien a la postre escribiría parte del mensaje. “Bueno, decilo de otra manera, pero vamos por ahí”, ordenó. Y añadió: “y que por favor quede claro que elijo quedarme por cuatro años, para que dejen de hablarse pelotudeces”. Claro que a la hora de grabar el mensaje el léxico empleado fue más prolijo y cuidadoso. Hasta dijo trabajar en lugar de laburar, lo que sí sorprendió a más de uno.
Desde el viernes, y durante todo el fin de semana largo, el intendente respondió mensajes en redes sociales y a través de su Whatsapp. Se sorprendió con el “me gusta” en Instagram estampado por Emiliano “Dibu” Martínez desde Indonesia (en los próximos días estará en Mar del Plata, donde ya se encuentran su esposa e hijos, a quienes se vio alimentando a los patos de la laguna de Punta Mogotes) y hasta dialogó con el ex presidente Mauricio Macri a quien le reveló el verdadero motivo que lo lleva a aspirar a un nuevo período de gobierno. “Te juro que lo único que pido es poder gobernar dos años normales, sin pandemia, sin esta inflación, sin esta locura. Me la pasé atajando penales, actuando como un piloto de tormenta, no un gestionador, que es lo que sé hacer. Y no pude clavar ninguna al ángulo. Era ir por la reelección o irme a casa. Si aceptaba ser candidato a vicegobernador el marplatense lo hubiese tomado como un abandono y yo quiero dar pelea”, se despachó ante Macri y algo parecido le confesó más tarde a Joaquín de la Torre, aunque le añadió que “si tenemos viento a favor y ganamos en Provincia y en Nación te aseguro que le meto asfalto a todo lo que esté quieto”, exageró entusiasmado.
Previo a conocerse su decisión, dos días antes un periodista de este diario escuchó “accidentalmente” una charla entre una mujer del barrio Cerrito Sur y Montenegro, tras un encuentro vecinal. La mujer se animó, y aunque tímidamente le lanzó la pregunta que ya se replicaba en distintos sectores. “¿Es verdad que su esposa quiere irse de Mar del Plata y por eso usted no quiere seguir como intendente?” disparó. Montenegro sonrió y tomándola del brazo la apartó del grupo, aunque no bajó la voz. “¡Por favor, no crea en todas las estupideces que se dicen! Y le cuento una infidencia. Eugenia ya me dijo que yo decida lo que quiera pero que hasta que los chicos no terminen la primaria ella no se va de Mar del Plata. Y le aclaro que todavía los mellizos no empezaron la escuela…”, añadió antes de despedirse.
Anunciada su candidatura, en el oficialismo local, de acá al sábado, restaría conocer cómo se conformará la lista de candidatos a concejales y si habrá (seguramente) representantes locales en la listas de aspirantes a legisladores bonaerenses por la quinta sección electoral, tanto del sector de Santilli como del de Grindetti, teniendo en cuenta el peso electoral de General Pueyrredon y la quinta sección electoral. En estos días se reunirán operadores de las distintas fuerzas que conforman la coalición gobernante local, y no es descabellado aventurar que entre los primeros lugares habrá representantes del PRO, la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica. ¿Quién encabezará la lista? La “terna” la conforman el secretario de Seguridad, Martín Ferlauto, el actual presidente del bloque, Agustín Neme (vence su mandato en diciembre) y un o una representante del radicalismo. En realidad, el intendente, trascendió, está más que conforme con la tarea que viene desarrollando Ferlauto, y buscaría que lo siga acompañando en el Ejecutivo, con lo cual se acorta la lista.
“Para ese puesto necesito a alguien de confianza, no un tipo que sea intendente. Alguien que pueda asumir sin riesgos el cargo si me tomo vacaciones”, le dijo Montenegro a uno de sus operadores. Cabe recordar que en su momento, tanto Nicolás Lauría como Alejandro Carrancio esgrimieron el 1 en la lista de concejales del actual intendente. Ambos, por distintas circunstancias, terminaron abandonando el bloque oficialista (hoy Carrancio suena como candidato a diputado provincial por La Libertad Avanza y Lauría acaba de lanzar su precandidatura a intendente) por lo que el jefe comunal, sin reemplazante en quien poder confiar, nunca solicitó licencia en estos casi cuatro años de mandato. Desde el principal despacho de la comuna se señala que “hay que salir a la calle y trabajar fuerte para lo que viene. La lista de candidatos a concejales debe ser atractiva para el electorado”, sostiene el operador “amarillo” quien añade que para el probable próximo período de gobierno que pretenden para Montenegro será “fundamental” contar con mayoría propia en el Concejo para no tener que depender de acuerdos con otras fuerzas, como ha sucedido con Acción Marplatense e incluso con el ex oficialista Nicolás Lauría. De once escaños, Juntos por el Cambio pondrá en juego sólo tres en las próximas elecciones, por lo que, en caso de lograr el ingreso de cinco ediles, obtendrá mayoría propia, al menos para los próximos dos años.
En la oposición, la alianza entre Fernanda Raverta (Frente de Todos) y Gustavo Pulti (Acción Marplatense) conformando “Encuentro Marplatense”, mientras se reúnen los equipos técnicos deberán definir las respectivas candidaturas, debiéndose aclarar que a nivel local no existirá boleta de Unión por la Patria, lo cual de alguna manera le cierra las puertas a otras agrupaciones o líneas para participar en la interna. Rodolfo “Manino” Iriart, el representante del “sciolismo” en Mar del Plata, ya puso el grito en el cielo. “Quieren proscribir al peronismo en Mar del Plata. Esperemos que no nos vuelvan a discriminar”, avisó el director del Correo Argentino. Mientras tanto, “Encuentro Marplatense” deberá definir quien será su candidato a intendente, y su lista de candidatos a concejales y legisladores. “Está claro que será candidata a intendenta Fernanda Raverta o Gustavo Pulti, aunque en estos momentos, mañana, todo puede cambiar, la veo a Raverta para ir por la intendencia y a Pulti como candidato a diputado provincial”, expresó en off the record uno de los más entusiastas “arquitectos” del acuerdo anunciado la semana anterior.
No va a ser tarea fácil conformar la lista de candidatos a concejales de “Encuentro Marplatense” sin dejar heridos en el camino. De ello se hablaba tras la primera reunión de los respectivos equipos coordinados por Pablo Obeid y María Eva Ayala. “No hay que poner el carro delante de los caballos, lo principal es contar con un verdadero acuerdo programático basado en una mirada integral sobre los problemas de la ciudad”, coincidían en señalar los voceros del kirchnerismo y de Acción Marplatense. Sin embargo, a la hora de las especulaciones, arranca la danza de nombres. Y surgen interrogantes que deberán quedar despejados de acá al sábado. “¿Y si ni Pulti ni Raverta son precandidatos a intendente y sale a escena un tapado?”, preguntaba enigmático el ex concejal del Frente de Todos tras uno de los encuentros.
El Frente de Todos, pondrá en juego 5 de sus 9 bancas, como se detallara en un exhaustivo informe publicado el pasado lunes en este medio. Se vence el mandato de la mismísima presidenta del bloque, Marina Santoro, y de los concejales Vito Amalfitano, Sol de la Torre, Roberto “Tata” Gandolfi y Roberto “Chucho” Páez. A la vez, al igual que en 2019, Acción Marplatense se juega la permanencia en el Concejo, ya que concluyen los períodos legislativos de Horacio Taccone y Paula Mantero. Se desprende que entre los lugares de preponderancia en la futura lista que ofrecerá Encuentro Marplatense al electorado, habrá al menos dos espacios para Acción Marplatense y por lo menos uno para el “massismo”, como parte del acuerdo existente a nivel nacional. LA CGT, la CTA, los movimientos sociales, muchos de quienes terminan su mandato y otros referentes del “ravertismo puro” también tienen aspiraciones de llegar a una banca. Así las cosas, no será nada fácil esa conformación que ya genera tensiones internas. “Como en todos lados, van a quedar heridos en el camino, pero después todo se acomoda. Nada nuevo bajo el sol”, dicen desde el corazón de la oposición, restándole dramatismo a la polémica situación.
Párrafo aparte para la polémica que se desató en el peronismo marplatense. El referente del sciolismo en la ciudad, Rodolfo “Manino”, Iriart salió con los tapones de punta. Disparó contra Fernanda Raverta y Gustavo Pulti, consignando que en el acta constitutiva de Unión por la Patria de la provincia, técnicamente acordaron que Daniel Scioli, como precandidato a presidente, y Victoria Tolosa Paz, como precandidata a gobernadora, no tengan boleta propia en General Pueyrredon. “El reglamento es igual en 134 de los 135 distritos bonaerenses. Sólo es distinto en General Pueyrredon donde hay un apartado para que no participemos”, se quejó el director del Correo Argentino, amplificándose su denuncia en las redes sociales donde se coincidió en señalar que “quieren proscribir al peronismo de Mar del Plata”. Ante tal posición, salió al cruce el senador provincial Pablo Obeid, quien expresó que “en la decisión de Raverta y Pulti de avanzar en un acuerdo programático, existe la total disposición a incluir a todos aquellos que se interesen en aportar ideas y soluciones a los problemas de los marplatenses. Las puertas están completamente abiertas, y en esto precisamente estamos trabajando”, dijo. Una historia que registrará nuevos capítulos hasta el sábado próximo.
El fin de semana largo fue útil también para que se multiplicaran los encuentros políticos, roscas y comidas donde no faltaron los que se “vendieron” como la mejor alternativa para las diferentes fuerzas en el contexto del frenético cierre de listas. Desazón en tanto para quienes creyeron que por pegar algunos carteles con su rostro en la vía pública se convertirían en alternativa para los próximos comicios, o al menos lograrían “mojar la medialuna” (Jorge Asís dixit) colándose en el medio de alguna lista. Al margen, interesantes discusiones entre oficialistas y opositores -a decir verdad primó el respeto y la cordura- en peña que nuclea a políticos y hasta a un par de periodistas. Entusiasmado, el dirigente peronista insistía en que “esta vez podemos llegar a ser gobierno en Mar del Plata”, y se basaba en números. Recordó entonces, generando la atención de todos, que en 2019 Montenegro ganó la elección con 168.385 votos, aventajando a Fernanda Raverta por sólo 9.712 sufragios y añadió que Pulti, como candidato de Acción Marplatense obtuvo 46.176 adhesiones. “Si se sumaban los votos obtenidos entre Raverta y Pulti se llegaba a los 204.849, o 36.464 más que los que tuvo Montenegro”, detalló.
Desde la otra punta de la mesa, veterano dirigente radical le saltó directamente a la yugular. “Ustedes son divinos. Es verdad que perdieron esa elección por 9 mil votos pero se te escapa el pequeño detalle que hace cuatro años el Frente de Todos ganó en todo el país menos acá”, dijo, y fue aún por más. “Ya que te gustan los números -sostuvo leyendo un artículo en su celular- debe recordarse que también hubo elecciones en 2021, es decir, hace dos años, el 14 de noviembre para ser más exactos”, chicaneó. “Juntos sacó 170.132 votos, el 46,70% del total, y el Frente de Todos 101.909, el 27,98% mientras que Acción Marplatense registró 26.730 o el 7,34%. Si sumás los votos del Frente de Todos y Acción Marplatense en esa elección te da 128.639, el 35,32%, es decir, 41.493 votos menos que los que se llevó Juntos por el Cambio. Esto no es solo matemáticas. Además, tené en cuenta que cuarto, pegado a AM, entró la Libertad Avanza con José Luis Espert como candidato, lo cual no es un detalle menor teniendo en cuenta el crecimiento que en las encuestas hoy tiene Javier Milei”, subrayó.
¿Tendremos una campaña “moderada” y tranquila en Mar del Plata? Difícil. Aún no se cerraron las listas y ya hubo munición gruesa disparada desde los distintos bunkers. La titular de la Anses, Fernanda Raverta, al anunciar la apertura del Frente, a través de una carta abierta, refirió que “estamos en un contexto difícil, de gran incertidumbre y preocupación”, resaltando que la ciudad “sufre hace ochos años un profundo estado de abandono por parte de la gestión local. El municipio -acentuó- está en pausa desde 2015”. En su mensaje enfatizó que “tampoco los problemas que teníamos los marplatenses a finales del 2019 fueron resueltos como se prometió”. Recogió el guante el senador provincial y jefe de campaña del intendente, Alejandro Rabinovich. Tras calificar a Encuentro Marplatense como “un rejunte que intenta armar el kirchnerismo con Raverta”, fustigó al principal espacio opositor señalando que “nos la tuvo muy complicada durante cuatro años, con discriminaciones constantes y tomas de terrenos para los amigos de Grabois”. Para arrancar, nada livianito por cierto… En tanto, lo vivido este martes cuando un local del PRO fue atacado por un grupo de manifestantes que protestaba contra la represión en la provincia de Jujuy, generó el repudio de los principales referentes políticos locales, e incluso de dirigentes provinciales y nacionales. El hecho se produjo este mediodía en avenida Colón y Tucumán, cuando una columna de manifestantes pasó por el lugar y algunos, encapuchados y con palos, se desviaron para generar destrozos en el local partidario.
En estas horas también se definirá cuál será la fórmula de Unión por la Patria a nivel nacional (¿Wado de Pedro?¿Sergio Massa?¿Axel Kicillof?) al tiempo que también se conocerán los nombres de los precandidatos a vicepresidente de las dos listas de Juntos. Mientras se insiste en que el gobernador jujeño, el radical Gerardo Morales secundará a Horacio Rodríguez Larreta (¿Facundo Manes puede ser el tapado o sorpresa?) las expectativas en distintos sectores de Mar del Plata apuntan a la decisión que tome Patricia Bullrich. Es que para precandidato a vicepresidente viene sonando insistentemente el nombre del marplatense Maxi Abad, actual presidente del comité provincial de la UCR. De confirmarse, sería el político local con la candidatura más encumbrada para los próximos comicios. La ex ministra de Seguridad tomará la decisión en las próximas horas, a partir de una terna de candidatos que les pidió a sus aliados radicales Alfredo Cornejo y Ernesto Sanz. Allí figuran Maximiliano Abad, jefe de la UCR bonaerense; Luis Naidenoff, senador nacional por Formosa, y Luis Petri, ex diputado mendocino. El marplatense picó en punta, según los principales analistas políticos.
De acá hasta el sábado, también deberá definirse quien será el primer candidato a concejal de los libertarios, que llevarán como precandidato a intendente a Rolando Demaio. El “armador local” de La Libertad Avanza, el concejal Alejandro Carrancio, ocupará seguramente el primer lugar en la lista de aspirantes a diputados provinciales por la quinta sección electoral. Carrancio viene de inaugurar dos sedes de La Libertad Avanza en Dolores y Castelli al tiempo que acaba de anunciar la incorporación de la agrupación Crear, a la que representa actualmente en el Concejo, a la fuerza liderada por Javier Milei. En las legislativas de hace dos años, la alianza Avanza Libertad obtuvo el cuarto lugar en Mar del Plata, quedándose con el 7,29% de los votos (26.558), a sólo 172 sufragios del tercero, que fue Acción Marplatense. En las antípodas ideológicas y políticas, Marcos Pascuan ya lanzó su precandidatura a intendente por el Nuevo MAS que a nivel nacional lidera Manuela Castañeira. Y quien no podía estar ausente es el insistente Alejandro Martínez, quien en las elecciones de hace cuatro años logró el 1,82% de los votos, con 7.599 adhesiones. Intentará competir por la intendencia en representación del Partido Obrero y el MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores). Rocío García será precandidata a concejal.